El Comité de Competición debe pronunciarse tras el lanzamiento de una botella que impactó en la mano de Gil Manzano
La Real se mantiene a la expectativa de la sanción que le pueda caer por el lanzamiento de una botella “semillena” que impactó en la mano de Gil Manzano y que el colegiado recogió en el acta. En el club se espera una nueva multa, pero dada la reincidencia podría producirse el cierre de un sector del campo, aunque nunca un cierre total.
El Comité de Competición hace años que no cierra un campo y es más partidario de clausurar sectores concretos. Así lo hizo en dos partidos en Vallecas en 2020 tras los cánticos contra Zozulya o en 2017 en el Sánchez Pizjuán al cerrar dos sectores por cánticos ofensivos.
Si se clausurara algún sector de Anoeta, los aficionados afectados de ese sector no podrían ser reubicados en otros lugares y en ese lugar la Real debería colocar una pancarta con “un mensaje de condena a los actos y conductas violentas, racistas, xenófobas e intolerantes en el fútbol y de apoyo al juego limpio”, tal y como se indica en el artículo 57 del Código Disciplinario.